Indica las pausas más o menos cortas dentro de la oración, permite conocer el sentido de las frases y puede señalar entonación ascendente o descendente según estas funciones:
1.Separa elementos análogos de una serie, ya sea de palabras, frases u oraciones (peras, manzanas, higos), que casi siempre rematan en una conjunción. No se pone como delante de un conjunción en una enumeración simple.
Por ejemplo:
- Calidad humana, inteligencia o hermosura.
- Se levantó, se bañó, se afeitó, se lavó los dientes y se fue al trabajo.
Aunque en algunos casos, por la complejidad de elementos enumerados, sí se necesita la coma antes de la conjunción para separar afirmaciones distintas, evitar ambigüedad o conseguir un sentido más claro, pues el elemento al que precede no es complemento del que antecede.
Por ejemplo:
-Le gustaba mucho intervenir, y criticar sin bases lo consideraba una agresión.
- Pedro disfrutaba el trabajo, y el ocio le parecía absurdo.
En este caso, se ha puesto una coma para precisar el sentido de oraciones distintas. Sin ese signo, parecería que "Pedro disfrutaba el trabajo y el ocio".
2. Separa palabras, frases u oraciones incidentales (de "incidente"): pueden suprimirse sin que se altere el sentido original) que cortan momentáneamente el sentido de la oración principal.
Por ejemplo:
- La naranja, según mi madre, es la mejor fruta (oración principal: "La naranja es la mejor fruta" incidental: "según mi madre")
Esto incluye todas aquellas aclaraciones, sinónimos, precisiones o aposiciones que deben ir entre comas (una antes y otra después; o que también podrían ir entre paréntesis o rayas) para que el sentido de la oración principal quede claro.
Por ejemplo:
- Buenos Aires, la capital, es una ciudad muy populosa.
- Nezahualcóyotl, el rey poeta, gobernó durante el siglo XV.
- Napoleón acabó sus días, me parece, en la isla de Santa Elena.
Obsérvese que hubiera podido decirse igualmente: "Buenos Aires es una ciudad muy populosa", "Nezahualcóyotl gobernó durante el siglo XV" y Napoleón acabó sus días en la isla de Santa Elena" (oraciones principales).
En el caso de palabras, frases u oraciones explicativas y determinativas, la coma les confiere sentido.
Por ejemplo:
- Los obreros, que votaron por la huelga, fueron reprimidos (oración principal: "Los obreros fueron reprimidos").
y su ausencia, otro distinto:
- Los obreros que votaron por la huelga fueron reprimidos.
En el primer caso se explica, con inciso, entre comas, que los obreros fueron reprimidos porque votaron por la huelga. En el segundo caso determinamos cuáles obreros fueron reprimidos.
Por ejemplo:
-Los niños, que estaban en el patio, echaron a correr.
En este caso, la expresión "que estaban en el patio" es un inciso explicativo que aclara dónde estaban los niños que echaron a correr. Es oración explicativa y va entre comas. En cambio, si escribimos:
- Los niños que estaban en el patio echaron a correr,
se determina o afirma que solamente echaron a correr los niños que estaban en el patio. Es una precisión, no una explicación. No es, pues, una oración incidental y por eso va sin comas.
Otros ejemplos de cambio de sentido por el uso de la coma:
- Lo hice, como me dijiste (Realicé algo que me indicaste)
- Lo hice como me dijiste (Lo realicé en la forma que me indicaste)
3. Separa los vocativos. Este uso es imprescindible. No tiene el mismo sentido escribir: "Juan entra en seguida" -afirmación-, que "Juan, entra en seguida"; en este caso llamamos a Juan (vocativo) diciéndole que entre.
Al principio de la oración, los vocativos llevan la coma después; al final de la oración, antes; en medio de la oración, antes y después.
Por ejemplo:
- Dios mío, ayúdame en este trance.
- En este trance ayúdame, Dios mío.
- Ayúdame, Dios mío, en este trance.
4. Indica la omisión del verbo ya sobreentendido (oraciones elípticas): "Su madre murió en 1876; su padre, en 1880". Se ha omitido el verbo "murió" en la segunda oración, lo cual se indica mediante la coma.
A este respecto, debe señalarse que en los títulos, encabezados y pies de fotos de los periódicos, la coma suele sustituir los verbos ser y estar: "El presidente, contra toda cordura"; "El gobierno, repudiado".
En esta función (la coma suple un elemento sobreentendido) están incluidos los dichos y refranes: "Afortunando en el juego, desafortunado en el amor"; "A pan duro, diente agudo".
En este sentido, la coma también se utiliza antes de introducir los apodos o sobrenombres, para suplir la palabra "alias": José Martínez Ruiz, Azorín, Mario Moreno, Cantinflas; pero no los cognomentos: Alfonso el Sabio, Juana la Loca.
5. Cuando de invierte el orden regular de oraciones más complejas, o de éstas en una clausula. Si se pone delante lo que debía ir después (condición, resultado, complemento), la parte que se anticipa debe llevar tras de sí coma.
Por ejemplo:
- Si vas a llegar tarde, avisa (Avisa si vas a llegar tarde).
- Colón llegó a América en 1692 (orden natural).
- En 1692 llegó Colón a América (alteración del orden).
Sin embargo, se recomienda no intervenir el orden regular de las oraciones en beneficio de la claridad de exposición.
La coma indica, pues, inversión del orden lógico de los componentes del enunciado, tal como sucede en los índices, listas y relaciones alfabéticas en general.
Por ejemplo:
- Nervo, Amado
- Corazón, enfermedades del
6. Se coloca después de adverbios y locuciones conjuntivas, aclarativas, confirmativas, concesivas: en cambio, por ejemplo, a saber, en efecto, en fin, esto es, no obstante, por tanto, ahora bien, al parecer, después de todo, en líneas generales, es más, así pues, finalmente, etcétera.
Cuando estas frases se insertan en medio de otros elementos, deben ir precedidas y seguidas de comas (pues sólo como confirmación,no como conjunción que introduce una oración subordinada causal). La norma es de aplicación general, pero muchas veces puede prescindirse de las comas sin que cause confusión alguna.
Casos en los que no se usa la coma:
1. Nunca entre sujeto y verbo, aunque aquél sea muy lago, ni entre verbo y demás elementos del predicado, salvo en los vocativos o que en uno u otro caso se intercalen elementos incidentales, que por tanto van entre comas.
2. Antes de abrir paréntesis, guión o corchete. Si la oración lo requiere, va después de que cierre el signo.
3. Antes de la conjunción ni en una cláusula ("Ni tú ni yo"); tampoco después de pero cuando precede a una interrogación ("Pero ¿no es esto distinto?"),a menos que medie una oración incidental. En las exclamaciones, suele quedar englobada: "¡Pero qué bruto!".
Referencia:
-Rivera, Sara (2010), Manual básico de estilo, México, UAEM.
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